Alejandro Canales
UNAM-IISUE-PUEES
Twitter: @canalesa99
(Publicado en Campus Milenio No. 829. Diciembre
5, 2019. Pág. 5.)
En el mes de
septiembre de este año, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO)
dio su discurso con motivo de su primer informe de gobierno, en el recuento de
logros aludió genéricamente al tema de las becas de posgrado. Ahora, este
primero de diciembre, al cumplirse un año de gestión, enfáticamente vuelve a
referirse a las becas del Conacyt y destaca su volumen. ¿Las cifras marcan una
diferencia? Veamos.
“El Conacyt incorporó
con becas de posgrado a 9 mil estudiantes adicionales de los que ya las
recibían”, dijo lacónicamente AMLO hace dos meses. Nuevamente, el pasado
domingo, al cumplirse un año del inicio de la actual administración, hacia la
mitad de su discurso, reitera el asunto de las becas.
En el zócalo
de la CDMX, el ejecutivo federal dijo: Avanzamos
en apoyar con recursos a universidades y centros públicos de investigación.
Este año el Conacyt ha destinado 2 mil 253 millones de pesos a ciencia básica o
de frontera. Además, se otorgaron 24 mil 453 becas nuevas a estudiantes de
posgrado. El presidente levantó la vista de las hojas que leía, recorrió con
la mirada a los asistentes y añadió: Lo
voy a repetir porque a veces no se
conoce esta información y pronunció una vez más la cifra de becas para
estudiantes de posgrado.
Luego, AMLO
siguió con el recuento de las becas destinadas a las Universidades para el
Bienestar Benito Juárez García. La referencia a las instituciones fue genérica,
no dijo que ya sumaban los 100 planteles que estaban previstos, tampoco cuántos
están en operación, pero sí destacó que ya atienden a 39 mil 600 estudiantes de
zonas marginadas y cada uno recibe una beca por un monto de 2 mil 400 pesos
mensuales.
Las becas para
jóvenes es una de las líneas de política educativa más reconocibles en esta
gestión. No obstante, en todas las administraciones anteriores el caso del
respaldo gubernamental para estudios de posgrado ha sido especial, porque se
trata de uno de los programas de mayor aliento a lo largo del tiempo y el más
generoso con estudiantes mexicanos –y no pocas veces de otras nacionalidades--
que ha posibilitado la expansión del sistema científico y tecnológico en
México.
Al inicio de
los años setenta, el origen del programa de becas va a la par de la misma
instauración del propio Conacyt. De hecho, al comienzo estaba volcado para
apoyar estudios en el extranjero porque la oferta nacional era relativamente
escasa. Sin embargo, también fluctuaba conforme el ciclo de la economía
nacional. En los años ochenta, en la década perdida, también sufrió las
consecuencias el apoyo para becas al extranjero: al inicio sumaban poco más de
2000 becas y al final de ese periodo eran menos de una cuarta parte de ese
total.
Después, la
economía se recuperó, volvió a crecer el volumen de becas; el apoyo para
estudios en el posgrado nacional comenzaron a cobrar mayor relevancia, en
detrimento del respaldo para estudios el
extranjero. También fue explícito un mayor impulso para los estudios de doctorado
y el fortalecimiento de los programas nacionales.
Sin embargo,
las dificultades con la gestión y operación del programa de becas han sido
persistentes. Las decisiones para poner en marcha diferentes medidas de control
de recursos financieros han sido erráticas, indiscriminadas e improvisadas; lo
fueron antes y lo siguen siendo hoy. El caso más reciente fue la negativa y
posterior rectificación a extender el periodo de apoyo a becarios en el
extranjero.
En fin, el
punto es si los números que expresó el ejecutivo federal difieren de los
alcanzados en la última década. Como se puede ver en el cuadro, el volumen de
becas ha sido oscilante, aunque la tendencia más alta es hacia la mitad del
periodo. Sin embargo, la cifra de 24 mil 453 nuevas becas indicada por el
presidente no aparece por ningún lado, por lo menos no está reportada en ningún
documento público oficial.
También vale
la pena notar que si fueran las 24 mil 453 nuevas becas que mencionó AMLO, tampoco
alcanzarían a las asignadas en el año 2017 a nivel nacional y mucho menos si se
consideran las del extranjero. Las cifras del cuadro con asterisco son del 1er
Informe de gobierno y son menores porque solamente cubren de enero a junio de
este año (pág. 304), pero son los datos que hay. Entonces ¿no hubo nuevas becas
para el extranjero? Difícil saberlo con la información disponible.
Lo cierto es
que, comparativamente, en este año no tuvimos un mayor volumen de becas en
posgrado. A diferencia de otros niveles educativos, los jóvenes que buscan
cursar estudios de alto nivel no figuran como prioridad. Efectivamente, como
dijo el presidente, a veces no se conoce la información.
|
BECAS NACIONALES
|
BECAS AL EXTRANJERO
|
TOTAL
|
|||
|
Vigentes
|
Nuevas
|
Vigentes
|
Nuevas
|
Vigentes
|
Nuevas
|
2010
|
33,982
|
18,292
|
3,414
|
2,746
|
37,396
|
21,038
|
2011
|
36,514
|
16,957
|
4,082
|
3,184
|
40,596
|
20,141
|
2012
|
41,755
|
22,180
|
4,559
|
4,029
|
46,314
|
26,209
|
2013
|
45,638
|
23,187
|
5,181
|
4,906
|
50,819
|
28,093
|
2014
|
49,640
|
25,815
|
5,991
|
6,258
|
55,631
|
32,073
|
2015
|
52,372
|
25,883
|
6,463
|
5,775
|
58,835
|
31,658
|
2016
|
54,170
|
27,003
|
6,420
|
6,203
|
60,590
|
33,206
|
2017
|
54,420
|
24,493
|
6,386
|
4,452
|
60,806
|
28,945
|
2018
|
52,649
|
|
3,313
|
|
55,962
|
|
2019
|
50,989
|
7,580*
|
3,214
|
1,128*
|
54,203
|
|
Fuente: Informe General de la Ciencia, Tecnología e Innovación (varios
años) y *1er informe de Gobierno