jueves, 31 de marzo de 2016

Observatorio de talento: recursos humanos y convenio en materia energética


Alejandro Canales
UNAM-IISUE/SES
Twitter: @canalesa99

En septiembre de 2014, cuando la reforma energética todavía era una promesa a constatar, también se trazó una estrategia para satisfacer la demanda de cuadros calificados que eventualmente requeriría tal reforma. Hoy, en un escenario muy diferente y cuando está por entrar en vigor el otorgamiento de permisos de importación de gasolinas y diésel, se pone en marcha un convenio de investigación con algunos centros públicos en materia de energía e hidrocarburos.

Fuente: petroquimex.com

Hace casi dos años, el “Programa estratégico de formación de recursos humanos en materia energética” (PEFRHME) impulsado por las secretarías de Energía (Sener) y Educación Pública (Sep), pero cuya implementación coordina Conacyt, estimó que México necesitaría para el 2018 alrededor de “135 mil expertos de alto nivel, profesionales y técnicos en distintas especialidades” del sector. 

El cálculo era que, a raíz de la reforma energética, entre el 2015 y el 2018 habría inversiones por alrededor de cincuenta mil millones de dólares (más o menos 12 mil 500 millones de dólares cada año). También estimaban que por cada millón de dólares invertido en el sector se generarían aproximadamente 2.7 empleos directos y por cada uno de estos se crearían otros 2.7 empleos indirectos (p. 21).

En resumidas cuentas, solamente considerando los empleos directos, se proyectaba que por lo menos se necesitarían 135 mil personas calificadas a lo largo de esta administración. Según sus cálculos, el 80 por ciento debían ser técnicos y el 20 por ciento restante de nivel superior o posgrado.

Fuente: portal.energia.gob.mx
A pesar de que se apuntaban las capacidades del sistema educativo nacional para satisfacer la demanda, se sugería que se debían “establecer los mecanismos para que, desde el diseño de programas educativos se considere el desarrollo de las competencias que demanda el sector productivo y, en el caso del posgrado, para incorporar en las líneas de generación y aplicación del conocimiento temas nuevos y de frontera”. De hecho, algunas instituciones educativas crearon programas ex profeso.

Además, en el PEFRHME se dispuso el otorgamiento de becas, el alineamiento del programa de cátedras, acciones inmediatas y a corto y mediano plazo, así como la creación de un Comité Técnico de Seguimiento e incluso un Observatorio de Talento.

El Comité se instaló en junio del año pasado, presidido por la Sener y con un integrante con voz y voto de cada una de las entidades participantes (Sep, Sre, Conacyt, Pemex y Cfe). Incluso, el director de Conacyt dijo que a partir de esa fecha y hasta el 2018 se otorgarían 60 mil becas a estudiantes, tanto para nivel técnico como para ingenierías, licenciaturas, diplomados y posgrados. La misma información se reportó en el 3er Informe de Gobierno (p. 330).

En cuanto al Observatorio de Talento, también responsabilidad de la Sener, se suponía que seguiría el mismo esquema de integración que el Comité (un participante por dependencia), pero los miembros solamente tendrían voz. Las función básica del Observatorio sería la de monitorear las tendencias sectoriales en temas de oferta y demanda de recursos humanos para tomar las decisiones correspondientes. Pero no, la instancia simplemente no se creó.

Fuente: centrosconacyt.mx
Ahora, como la acción más reciente, está la firma de un convenio para impulsar la investigación en programas de energía e hidrocarburos. El instrumento está firmado por los titulares de Conacyt, el Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (Ipicyt) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos. Esta última fue creada casi al final del 2008, con la encomienda de regular y supervisar la exploración y extracción de carburos de hidrógeno, pero no para generar conocimiento al respecto.


El convenio firmado es un marco general, porque incluye un consorcio integrado por 11 centros públicos de investigación, coordinados por el Ipicyt, así que luego habrán de firmarse convenios específicos.

A la vista de los cambios introducidos por la reforma energética nacional, los problemas ambientales que ya tenemos (y seguramente se agravarán), así como el panorama del mercado mundial de energéticos, es un avance importante tratar de respaldar las decisiones con un amplio y sólido conocimiento técnico. Sin embargo, el mayor problema es que los cálculos de unas y otro, hasta ahora, siguen siguen lógicas diferentes y no parecen coincidir. Al menos no en lo que concierne a este sector. Ni hablar de los graves problemas de corrupción ¿Se podrá modificar? Seguramente. Pero no será pronto.
Fuente: www.eluniversal.com.mx

Posdata: ¿Alguna explicación oficial sobre la violación, por un presunto hacker kurdo, a la página web de la Academia Mexicana de Ciencias el fin de semana pasado? Hasta ahora ninguna.







(Publicado en Campus Milenio No. 650 Marzo 31, 2016, p.5)

jueves, 17 de marzo de 2016

Educación de adultos: ¿certificar o simular lo básico?  

Alejandro Canales
UNAM-IISUE/SES
Twitter: @canalesa99

El Instituto Nacional de Educación para los Adultos (Inea) anunció la semana anterior el inicio de un amplio e intenso Programa Especial de Certificación (Pec), para reconocer saberes y conocimientos de las personas mayores de 15 años que no han concluido su educación básica, con lo cual podrán acreditar y certificar la primaria y la secundaria.


Fuente: snn.imer.gob.mx
Aunque se dice que es un programa novedoso, no tiene nada de nuevo; el Inea ya tiene experiencia acumulada en certificar conocimientos básicos. Sin embargo, lo que sí sería distinto es el volumen de personas que intenta certificar en el año en curso: un millón y medio personas.

En general, salvo medidas o campañas específicas, el promedio anual de personas que el Inea logra alfabetizar, suman alrededor de 100 mil y otra cantidad similar para el caso de personas que culminaban su educación básica. Aunque, curiosamente, en esta administración los números se han modificado más rápidamente y se supone que el promedio de logro se ha triplicado o cuadruplicado.

Fuente: archivo.e-consulta.com
A diciembre de 2013, el Inea estimaba que la población mayor de 15 años en situación de rezago educativo era, en cifras redondas, de 32 millones de personas. A la vez, de ese total, 5 millones eran personas que no sabían leer ni escribir; 10 millones no habían terminado la primaria; y otras 17 millones seguían sin concluir su educación secundaria.

La estimación del mismo organismo, a diciembre de 2015 (con proyección de población de Conapo de abril de 2013), es que el rezago es de 30.1 millones. De ese total: las personas analfabetas representan 4.4 millones; las de primaria inconclusa 9.6 millones; y las que no terminaron la secundaria 16.1 millones. Es decir, en los últimos dos años, el rezago educativo disminuyó casi en dos millones de personas. También, respecto del 2013, apenas fueron alfabetizadas alrededor de 600 mil personas, otras 400 mil concluyeron la primaria y casi un millón la secundaria, el mayor logro.

A pesar de que los cálculos finales pueden variar, dado que son estimaciones que luego ajusta el mismo organismo, en función de la publicación de nuevas proyecciones de población o cambios en la metodología de cálculo, las estimaciones indican que en dos años casi se redujo en dos millones el rezago educativo.

Fuente: www.sdpnoticias.com
Ahora, el director del Inea, Mauricio López Velázquez, sugiere que, entre el 11 de marzo y el primero de octubre, en menos de un año, con la participación de tres secretarías, Educación Pública, Desarrollo Social y Trabajo, el rezago disminuya en 1.5 millones sin considerar el analfabetismo. Este último, según el programa institucional del Inea de este periodo, tiene como meta lograr que para el final de la administración 2.2 millones de personas que estaban en esa condición, aprendan a leer y escribir (Campus Milenio No. 639), aunque a la fecha apenas lleva 400 mil.

El titular del Inea propone como meta certificar  a medio millón de personas en primaria y a más de un millón en secundaria. Dijo: “este novedoso programa se lleva a cabo a través de dos procesos que se realizarán en Ocho Jornadas Nacionales de Certificación y a través de Jornadas Permanentes, en más de mil 500 plazas comunitarias que se distribuyen en toda la República, cerca de 800 Centros Comunitarios de Aprendizaje”.

Además, precisó que el proceso podría realizarse mediante un examen en línea o con lápiz y papel, y “un portafolio de evidencias que estará compuesto por una autoevaluación, una evaluación de terceros y la recopilación y cotejo de certificados, reconocimientos y diplomas de capacitación, a fin de verificar los saberes adquiridos a lo largo de su vida, conforme a políticas que se alinean a las mejores prácticas internacionales".
 
Fuente: www.educacionyculturaaz.com
Una campaña a favor de abatir el rezago es ampliamente deseable y justa, lo mismo que plantearse una meta ambiciosa para sacar del atraso educativo al mayor número de personas posible. También muy necesario asegurar los mecanismos de acreditación y certificación de las personas. Sin embargo, con todo, las experiencias del propio Inea con la imposición de indicadores, y del sistema educativo en su conjunto, han sido realmente poco edificantes, cuando no indeseables.

Las iniciativas que toman como punto de referencia el cumplimiento de indicadores para premiar o castigar el desempeño, sean los puntos de una prueba de logro educativo, el cumplimiento de una meta en plazos imposibles o alcanzar un determinado índice, colocan una estructura de incentivos para la perversión y el fraude en las prácticas cotidianas.

Uno de los mayores escándalos se verificó en el 2010 en el Inea, cuando un diagnóstico calculó que alrededor del 10 por ciento de asesores y promotores había incurrido en casos de corrupción. Igualmente, ha sido denunciada la venta de certificados de primaria y secundaria, y en realidad de todos los niveles.

¿Es urgente reducir el rezago? Sin duda. Pero sin simulaciones.



(Publicado en Campus Milenio No. 648 Marzo 17, 2016, p.5)

jueves, 10 de marzo de 2016

La representación de México en UNESCO


Alejandro Canales
UNAM-IISUE/SES
Twitter: @canalesa99

La comunicación llegó a la Cámara de Senadores en la sesión del pasado día primero de marzo. A través de oficio, el presidente Enrique Peña, a través de la secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Claudia Ruiz Massieu, nombró a Andrés Roemer como “Embajador Extraordinario y Plenipotenciario para que funja como Representante Permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura” (Unesco, por sus siglas en inglés). 

Fuente: cbtelevision.com.mx
El oficio dirigido a los Senadores no detalla trayectoria ni virtudes de Andrés Roemer. Tampoco la presidencia ha dicho nada al respecto, ni siquiera la SRE y menos la SEP que seguramente, en un nombramiento como este, debe tener voto ponderado. El nombramiento de un representante ante un organismo internacional como Unesco es un asunto relevante que ameritaría mayor consideración.

Andrés Roemer es un personaje relativamente público, principalmente identificado por sus programas de televisión con TV Azteca, aunque también desde julio de 2013 se desempeña como cónsul general en San Francisco California. Es bastante elocuente e ilustrativo el detallado resumen de su persona que se muestra en la página web del consulado: “es escritor, politólogo, emprendedor, creativo, filántropo, productor de televisión, promotor cultural, dramaturgo, catedrático e intelectual”.

Fuente: mision.sre.gob.mx
No solamente. En la misma página del consulado, después de enumerar obras y las extensas y multifacéticas actividades del ahora propuesto embajador, en la que se incluye su labor como difusor de la ciencia y defensor de los derechos humanos, se anota que el periódico San Francisco Chronicle lo define como una ‘figura pública rara que merece ser llamada un hombre del renacimiento’. Nada menos y, precisamente, hasta ahora nos venimos a enterar.

Fuente: www.aztecatrece.com
El nombramiento del representante ante Unesco todavía no es un hecho. El oficio fue turnado en el Senado a las comisiones unidas de Relaciones Exteriores y de Relaciones Exteriores Organismos Internacionales, ahí será dictaminado y, en su caso, ratificado o rectificado.


De acuerdo a la normatividad constitucional (fracción III del artículo 89), el presidente de la República tiene la facultad de nombrar a los embajadores y cónsules generales, además de los empleados superiores de  Hacienda y a integrantes de órganos colegiados de telecomunicaciones, energía y competencia económica, pero tales nombramientos deben ser aprobados por el Senado.

El caso es que algunos de los integrantes de la comisión de relaciones exteriores del Senado, miembros del Partido Acción Nacional, desde el mismo día en que se recibieron los nombramientos, indicaron que solicitaron al ejecutivo federal que retire los nombramientos que envió, “porque obedecen más a la militancia política que al servicio exterior y a la equidad de género” (Boletín Senado 01.03.2016).

La relevancia de Unesco, como el principal organismo multilateral dentro del campo de la educación, la ciencia y la cultura a nivel internacional --aunque mayormente centrado en el nivel básico— está fuera de duda. Una de las mayores acciones y logros internacionales que concluyó el año pasado fueron los Objetivos de Desarrollo del Milenio, pero no menos importantes han sido sus conferencias mundiales sobre ciencia y educación superior.

Aunque, ciertamente, hoy parecen muy lejanos aquellos años de mediados del siglo pasado en los que Jaime Torres Bodet fue el segundo director general de Unesco o los representantes de México eran Miguel León Portilla, Luis Villoro o Pablo Latapí. Otra época en la que el país tenía una reconocida reputación en la diplomacia y en el servicio exterior. Y sí, esos ya están muy distantes. No solamente ha perdido liderazgo, la misma representación en Unesco fue modificada en esta última década

Fuente: twitter.com
Seguramente usted lo recordará, en la administración de Felipe Calderón, al comienzo del 2010, cuando se dijo que por razones presupuestales y para ahorrar recursos, la representación permanente ante Unesco y la embajada de México en Francia recaería en una sola persona, lo cual generó reacciones adversas.

Incluso, el asunto motivó un punto de acuerdo de los legisladores en los que exhortaron al ejecutivo federal para que la SRE informará sobre las razones que había para concentrar las dos funciones y también para que mantuviera en Unesco un “embajador específico y autónomo de cualquier otra embajada de México” (Gaceta LXI/1PPR-8/23751).

Pero no, durante los primeros meses del 2010 se conservó una sola representación y quedó en la ambigüedad en los tres años siguientes. Fue en agosto de 2013 cuando se volvió a nombrar a un representante permanente.

Ahora, tal vez no se necesita un ‘hombre del renacimiento’, solamente una verdadera representación de Estado, no de gobierno, que atienda y entienda la misión de la oficina y su relevancia.


(Publicado en Campus Milenio No. 648 Marzo 10, 2016, p.6

jueves, 3 de marzo de 2016

La agenda (educativa) en la Ciudad de México


Alejandro Canales
UNAM-IISUE/SES
Twitter: @canalesa99

Algo tardará pero no mucho. Probablemente al inicio del próximo ciclo escolar, estarán los primeros casos de otorgamiento de Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios (RVOE) por parte de la Secretaría de Educación de la Ciudad de México. La dependencia, en esta semana, emitió una convocatoria para un curso de inducción y podría ser la opción “B” (o incluso “A”) para algunas instituciones de educación media superior y superior en la entidad (Gaceta Oficial 29.02.2016). Aunque no solamente.

Fuente: www.consumidor.gob.mx
Hace dos semanas, en estas páginas, anotamos que la educación, formalmente, no estaba en el paquete de la reforma política de la Ciudad de México (Campus Milenio No. 645). Pero también, dijimos, era indudable que el tema se estaba movilizando muy rápido y seguramente formaría parte de la agenda. Además del obligado asunto de la descentralización de los servicios educativos en la entidad, ahí estaba ya el RVOE del gobierno local y la idea de nuevas escuelas en cinco delegaciones políticas gobernadas por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena).

Ahora, a la serie de iniciativas se ha sumado el gobierno federal en conjunto con el gobierno local y este último también avanza en la puesta en marcha de acciones. La autoridad federal, en la misma semana que se anunció el comienzo de los cursos propedéuticos de los cinco planteles educativos de Morena, a través de la Secretaría de Educación Pública emitió un comunicado para aclarar la situación.

La dependencia gubernamental indicó que de los cinco planteles anunciados, solamente había recibido dos solicitudes de RVOE: una de la autodenominada Escuela de Derecho Ponciano Arriaga A.C. y otra de la Escuela de Contabilidad y Administración Pública Leona Vicario, A.C (Comunicado SEP No. 62. 18.02.2016). El RVOE, según la normatividad vigente, es un acuerdo expreso de la autoridad educativa que reconoce la validez a estudios impartidos por un particular.

Fuente: www.periodicoenfoque.com.mx
 La Secretaría puntualizó los aspectos aplicables de la norma. Por ejemplo, aclaró que presentar la solicitud de RVOE no era ninguna garantía para su otorgamiento; carecer del reconocimiento significa que los estudios ofrecidos no tienen validez, por tanto no se puede obtener una cédula profesional y tales escuelas no pueden formar parte del sistema educativo nacional. Incluso, advirtió que las instituciones sin reconocimiento de validez oficial tenían la obligación de informarlo a los alumnos.

Fuente: www.ecopolitico.com.mx
Hasta ahí, la aclaración de la autoridad educativa federal resultaba pertinente. Especialmente frente a las inquietudes y presiones mediáticas que trataban de indagar cuál era el estatus oficial de las escuelas promovidas por Morena. A nadie escapa que la situación legal en todos los órdenes cada vez parece más una referencia virtual que a nadie importa.

Lo relativamente sorprendente es que a la semana siguiente de la aclaración, el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, y el jefe de gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, se reunieron para acordar una estrategia de “cero rechazados en educación superior en la Ciudad de México y una educación de calidad” (Comunicado SEP No. 67).


La información oficial del encuentro es relativamente escueta, solamente indica que los titulares de las dos entidades acordaron convocar a rectores y directores de IES en la zona metropolitana para crear una comisión, con el propósito de coordinar las acciones necesarias para que todos los aspirantes de la localidad puedan continuar sus estudios superiores. Muy breve y tal vez con escaso fin práctico, pero suficientemente clara para escribir el mensaje de que habrá un lugar para esa cifra incierta de jóvenes que no alcanzan un lugar en las instituciones que desean. Una cifra que quiere disputar e intenta capitalizar precisamente la iniciativa de Morena.


Fuente: www.proceso.com.mx

Tal vez la misma reunión fue ocasión para acordar lo función concurrente entre gobierno federal y local para el otorgamiento del RVOE y por ello la aparición de la reciente convocatoria del gobierno de la Ciudad de México para el el curso de inducción, dado que en la reunión participaron la secretaria de Educación local, Alejandra Barrales, los subsecretarios de SEP, Otto Granados y Salvador Jara, así como el director general de Acreditación, Incorporación y Revalidación, Emiliano González.

Hace dos semanas, la columna vecina de Roberto Rodríguez dio cuenta de algunas de las modificaciones y negociaciones sobre el RVOE en las últimas dos décadas, con las consecuencias que ya sabemos. Ahora probablemente estamos en el comienzo de una nueva fase del mismo episodio.

El asunto es que ahora hay más jugadores en la arena y todos están viendo el calendario de la próxima elección federal, más que los problemas educativos o las dificultades de los jóvenes. Las normas pueden ser flexibles, la ampliación de oportunidades educativas para grupos desprotegidos siempre puede ser un buen argumento y la calidad... Bueno, la calidad siempre se necesita.


(Publicado en Campus Milenio No. 647 Marzo 3, 2016, p.5)